La escudería desveló desde Maranello, con ilusión pero también con prudencia, que su monoplaza es el más agresivo de los últimos años
Mirada de satisfacción sentado encima del coche, la casa de Enzo Ferrari con el tejado cubierto de nieve y el circuito de Fiorano completamente blanco. Así recibió Fernando Alonso su nuevo Ferrari la mañana en la que debía haberse dado las primeras vueltas a la pista en la bestia roja, el F2012. Así se llama el monoplaza con el que Ferrari pretende devolver al asturiano al lugar que le corresponde, con el que Alonso espera ganar su tercer título mundial.
No será fácil, la competencia es dura, pero Ferrari al fin ha arriesgado. Si el pasado año el F 150 Italia dejó fríos a todos los presentes, este año los millones de personas que han descubierto el F2012 por Internet al menos se han visto sorprendidos. El coche tiene un original morro 'de pato', a dos alturas, que ha creado tendencia en la F-1 este año (Force India o Caterham también lo usan, por ejemplo) y se ve muy trabajado, con muchos nuevos elementos aerodinámicos. Riesgo.
Los alerones cambiarán de aquí a Australia, pero por ejemplo aplican el efecto doble fondo que pretende más agarre aprovechando el aire que llega del alerón delantero y los nuevos pontones, más estrechos pero que recogen mejor el aire. El coche es más corto, pero tiene una batalla superior y la parte de atrás es más compacta.
Además monta suspensión pull rod, es decir, con la barra trabajando a tracción, el aire fluye mejor y reduce el centro de gravedad. Eso sí, es un sistema algo más delicado. Lo hace delante y detrás. Un nuevo riesgo. Mucha suerte…
Vía As.com
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