El botón del pánico
El ingeniero británico, de 50 años, no es pesimista: «Habrá una variedad de órdenes durante todo el año. Si empiezas con el pie izquierdo, y habrá gente que empiece así porque no hay referencias, eso no te impide desarrollarte conforme avanza el año. No espero que la parrilla de Bahréin se parezca a la de Abu Dhabi, habrá una transición fluida». Seidl, tira de fina ironía: «Por mi parte, apretaré el botón del pánico. Y escucharé discursos motivacionales de James».
En lo relativo a las evoluciones y mejoras que se pueden llegar a incorporar a lo largo de la campaña, Key apunta al techo de gasto (de unos 150 millones de euros): «Es difícil ver un coche en los test y otro en Bahréin, la arquitectura del coche se puede variar un poco, pero no es fácil de cambiar. Hay dos áreas de desarrollo: la aerodinámica, donde veremos mucho desarrollo durante la temporada, como por ejemplo en el suelo; y luego los progresos sobre la plataforma en sí. Las ruedas son nuevas, aprenderemos con la experiencia. Lo más visible y lo que más rendimiento aportará vendrá de la aerodinámica».
«Si gastas mucho al principio…»
“Necesitas ser cuidadoso, si gastas mucho al principio, puede que luego tuvieras más datos disponibles” para fabricar paquetes de evoluciones más interesantes, explica. En cualquier caso, Key descarta por ahora la práctica de copiar ideas ajenas a discreción: «El primer paso es lo que hemos podido diseñar hasta ahora; el segundo, aprender de tu coche y mejorarlo; el tercero, ver las ideas de los demás, igual que nosotros daremos ideas».
Para los test de pretemporada en Barcelona (23-25 de febrero) y Bahréin (10-12 de marzo), el objetivo es simple: «Hay que demostrar que la plataforma funciona y buscar los puntos de referencia. Tandas largas y tandas cortas para entender los neumáticos, el coche con diferentes niveles de combustible… Hay que hacer un buen trabajo de correlación. El túnel de viento y el CFD (simulación digital) pueden estar bien representados o no. Hasta ahora hay muchas matemáticas detrás, pero debemos ir a por los datos». Un dolor de cabeza para el diseñador del coche de Norris y Ricciardo, presentado el pasado viernes..
Vía As.com
Pues si es Alpine, se tendrán que joder y bailar, si es Mercedes o RBR, tendrán la alfombra roja y un camarero con champán para lo que quieran y los demás, pues ya se verá, según gustos de la maFIA.