Red Bull, OK al cambio
La maquinaria de la F1 está engrasada y con una única dirección, forzar a Honda a romper con McLaren, o al menos a que no ponga pegas y tragar con irse a Toro Rosso los próximos años.
McLaren ya no se cree que enderece en tres años -en 2020 cambia el reglamento de motores-lo que no ha hecho en los tres anteriores y quiere el divorcio con tanta fuerza que deja entrever a sus medios de confianza que ni siquiera hay marcha atrás: O lo hacemos como amigos o como enemigos.
Para evitar la segunda solución hubo la riada de reuniones en Monza el pasado domingo con Masashi Yamamoto, jefe de motorsport de Honda, con los nuevos dueños de la F1, Liberty, Chase Carey, Ross Brawn y Sean Bratches, jefe comercial de la F1, las fuerzas vivas del Circo, pero por si no fue suficiente Jean Todt ha enviado una carta directa Takahiro Hachigo, presidente de Honda, expresando el deseo de la mismísima FIA de que no se vayan o repitan la espantada de 2008, cuando dieron portazo a la F1 con el coche ya construido.
No quieren perder a Honda
«No queremos perder a Honda«, reconoce el propio Bratches. «Honda es un valioso socio de la F1 y estamos tratando de hacer todo lo posible para convencer a las partes afectadas de que deben seguir en la categoría y crecer. Honda es beneficioso para todos».
Todos quieren lo mismo, hasta Toro Rosso y Red Bull dan su OK a que Renault se vaya a McLaren y recibir a Honda. Al igual que McLaren, se sienten tan seguros, con el viento de cola, que además meten prisa para hacer la operación.
«Necesitamos saber a dónde vamos porque ahora es un problema de tiempo de cara al diseño del coche del año que viene», afirma Boulllier, responsable del equipo británico, con las mismas prisas de Toro Rosso para decidir y terminar el chasis en torno a un motor u otro, que no es lo mismo.
Por si quedaban dudas de Red Bull, ayer las despejó Horner. «Tenemos derecho a veto sobre los equipos que pueden ser potencialmente suministrados por Renault. Lo introdujimos en nuestro contrato hace diez años, cuando el bueno de Ron Dennis nos negase el suministro de motores Mercedes. En teoría, podríamos decir que no a McLaren-Renault, pero estaremos encantados de que tengan ese motor«, desvela en Fox Sports.»Por supuesto, si hay un cambio, no pondremos ningún problema», insiste Horner,
«Los tres motores han ganado carreras este año, así que no creo que estén muy lejos en prestaciones, tendríamos un gran coche porque tenemos un gran chasis y con más potencia podríamos ver hasta donde es capaz de llegar», cierra Zak Brown.
Vía Marca.com
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Esto si que es un circo, de tres pistas. Los contratos tendrían que hacerlos con menos clausulas y que cada uno contratara con quien le saliera de las narices cuando quisiera.
Ganas de ver ya Mclaren-Renault, ojala que el conjunto se porte del diez.
La verdad es que en un Mundo tan complicado y caro, cuesta creer que cuando hicieron el contrato entre McLaren y Honda, no tuvieran una clausula, con tantas otras que si tienen, refiriéndose en el caso de que el motor fallara como lo ha hecho. Deberían tener más derechos y menos deberes a la hora de romper el contrato cuando algo no funciona. Cosa distinta hubiera sido que por otro motivo lo hubieran querido romper a pesar de que el motor andara. Caso similar si hubiera sido al revés, si Honda hubiera funcionado perfectamente y el chasis no. Deberían tenerlo en cuenta para sucesivas ocasiones. Pero me reitero que difícil de creer que un mundo tan perfecionista esto se haya pasado por alto, a buen seguro motivos habrá.