Victoria de Hamilton, Sainz 10º y otro abandono de Alonso
Ultra. Más allá de… El leve aleteo de una mariposa puede cambiar el mundo. La teoría del caos aplicada a la Fórmula 1. Y los neumáticos Pirelli. Y el talento de Lewis Hamilton. Y su Mercedes. Ultra. Y las mariposas aleteando sin sentido por el aire. Era una carrera relativamente fácil para el piloto británico, tenía a su rival Sebastian Vettel a dos segundos cuando por detrás la rivalidad extrema de Checo Pérez y Esteban Ocon provocó un nuevo toque entre los dos pilotos de Force India, el mexicano con un pinchazo, el francés con el enfado en el cuerpo y un coche de seguridad en la pista que, teóricamente, podía cambiarlo todo. Hamilton era líder, pero no tenía neumático ultrablando para terminar la carrera cuando faltaban nueve vueltas, se tenía que conformar con el blando, mientras que Vettel ponía esas gomas de Pirelli, algo que le debía valer para pasar al británico y ganar la carrera. Por detrás llegaban Bottas, Raikkonen y Ricciardo con el Red Bull. En la arrancada de esa carrera el australiano adelantó de manera magistral al Mercedes y el Ferrari dejando claro que está a otro nivel y que los dos finlandeses son clase media viviendo en palacio.
Vettel lo intentaba, casi lo logra al reanudarse, pero Hamilton se defendió bien. No lo iba a tener fácil. A falta de cinco vueltas el alemán estaba a un segundo del tricampeón de Mercedes. Lo iba a volver a intentar. Debería. El tetracampeón que he elegido Ferrari para volver a la gloria tenía un neumático mucho mas rápido.. Ultra.
Por detrás Carlos Sainz luchaba por los puntos, décimo a un segundo de Ocon y su Force India. El madrileño iba a una estrategia de una parada que el coche de seguridad tuvo que cambiar sobre la marcha. La carrera del español muy seria, tras una salida con algún problema supo calmarse, pilotar a buen ritmo con un coche que no tiene motor para Spa. Calidad. Décimo final. Un punto.
Unas cuantas vueltas antes la desesperación de Fernando Alonso terminó con un nuevo abandono tras protagonizar algunos de los mejores momentos del gran premio, salida genial ganando tres posiciones, adelantamiento doble a Hulkenberg y Ocon… hasta que le empezaron a pasar en las rectas y del séptimo puesto de repente estaba decimoquinto. Alonso enfadado. Claro. Clamando por radio. Por supuesto. Penando ¿Dios sabe qué? Y el mundo preguntándose por qué no aletea una mariposa con el ala favorable para este genio astur de terrible talento para que algún día vuelva a estar en el sitio que le corresponde. Hubo opciones de volver a Ferrari, pero los italianos no han querido esta vez. Alguno al terminar la carrera lamentaba no tenerle en ese coche tras Hamilton. Ultra. Preguntas.
Porque Vettel no pudo y la carrera fue para el inglés. Quinta victoria para Lewis, se acerca en el liderato del Mundial a Seb, a siete puntos. En el podio, Ricciardo, por delante de los finlandeses. Ultra genio el sonriente australiano. En Monza más. Veremos a Sainz luchar, Alonso sufrir y dejar algún destello de eso que tiene, ante la que fue su afición, a Vettel intentarlo…. ¿a Hamilton ganar? Veremos… Quizá la mariposa aletee y el caos lo pueda cambiar todo. Esa es la única esperanza.
Vía As.com