Uno de los más veloces del año, para un piloto de 42 años. El más rápido fue uno de Bottas en Austria 2017, con 0,201 milésimas
Lejos de relajarse por el descenso en el potencial de su coche, Fernando Alonso no se relaja e intenta exprimir al máximo cada posibilidad de inicio a fin en las carreras. La salida de Suzuka, en la que adelanto a cuatro rivales, dones en la primera recta y dos en la primera curva, sigue siendo objeto de análisis en la web oficial de la F1, sobre todo por el espectacular tiempo de reacción del asturiano. Continue reading »
Alonso regaló a Suzuka una salida de esas que justifican el precio de la entrada. Por arrancada se comió a Tsunoda, y con un bandazo a la derecha superó a Russell en la recta. Trazó por el interior tanto la curva uno como la dos, así que ahí se aprovechó de la pelea entre Pérez y Hamilton para adelantar a ambos antes de encarar las eses. Del décimo al sexto, su carrera parecía mucho más prometedora a partir de entonces. Lástima que la degradación y la falta de velocidad punta dictaran otra cosa: Fernando paró pronto (había salido con blandos), su equipo le hizo cubrirse de Tsunoda y llegó con pocas ruedas y menos herramientas para luchar al segundo y tercer ‘stint’, así que debió conformarse detrás de Verstappen, McLaren, Ferrari y Mercedes. Fue octavo en el GP de Japón. Cuatro puntos más.
El Aston Martin de Alonso tenía daños en uno de los elementos de la suspensión delantera, lateral izquierdo, y por ahí se explica la falta de rendimiento del monoplaza durante la carrera en el GP de Singapur. Aunque no cuantifican la pérdida, el asturiano confirma que era “significativa” y contribuyó para que el AMR23 cediera potencial y terminase luchando con coches más lentos (Alpine, el Red Bull de Pérez antes de la parada…) y sin ritmo para adelantarlos.
Carrera dura para Alonso, que salió séptimo y llegó a rodar sexto virtual. Un error en la entrada del pit lane le hizo recibir una penalización de cinco segundos, y luego un pit-stop muy lento (25.8 segundos) le retrasó del todo para que terminase 15º en un circuito que debía ofrecer oportunidades. En Singapur el objetivo de Aston Martin era otro. Ahora toca hacer autocrítica.
Calor húmedo insoportable, pocas horas de sol al día y un circuito que roza lo estridente con 19 curvas en cinco kilómetros. La Fórmula 1 ya está en Singapur, la ciudad que inventó las carreras nocturnas. Se acabó la temporada europea, aunque no está tan claro que se vaya a acabar también la racha de Verstappen (diez victorias consecutivas) o Red Bull (ganaron todas las carreras de 2023). El circuito puede ayudar, aquí puede haber accidentes, coches de seguridad y estrategias alocadas que dan resultado. Si no, que se lo digan al propio Max: el año pasado vivió quizás su peor carrera del año, con accidente incluido, y acabó séptimo. El león neerlandés no conoce la victoria en la ciudad del león.
No fue una excesiva sorpresa el paso atrás de Aston Martin en Monza, porque lo tenían apuntado como uno de los peores circuitos para el AMR23; pero sí fue difícil de digerir la agotadora carrera que vivió Alonso camino del noveno puesto con un monoplaza sin agarre, deslizando en cada vuelta, y el mal fin de semana en general de Stroll. El paquete de baja carga no funciona, el nivel de ‘drag’ es elevado y no pueden competir siquiera contra el resto de las escuderías con motor Mercedes. Y no es solo cuestión de falta de velocidad: Alonso marcó 346,5 kilómetros por hora en la clasificación del sábado (undécimo más rápido) y eso le sitúa delante de Hamilton (340) o Russell (338), que vivieron una carrera mucho más plácida y a ritmo camino del sexto y quinto puesto, respectivamente.
Días antes del comienzo del Gran Premio de Italia, se hizo viral en redes sociales un vídeo en el que una señora mayor pedía con deseo «algo de Fernando Alonso» firmado por él. Pues hoy, en un evento organizado por Finetwork –patrocinador de Alonso– en el circuito del Jarama, el piloto español ha tenido el detalle de regalarle en persona a la protagonista de esta historia una gorra de Aston Martin con su autógrafo.
Josep Pedrerol ha vivido una intensa experiencia ejerciendo de «copiloto» de Fernando Alonso. El presentador de El Chiringuito de Jugones se subió en un vehículo junto al piloto asturiano en el circuito de El Jarama y vivió unos minutos de máxima tensión.
“¿Que si esto corre? Ahora lo vas a ver”. No es una amenaza, es una evidencia. Es imposible entrar en la cabeza de un piloto mientras pilota, pero quizás convalide como experiencia cercana y aproximada al automovilismo profesional, un deporte extremo, las dos vueltas que Fernando Alonso regaló al periodista de AS dentro de un Aston Martin Vantage DTM en el Circuito del Jarama. “Es uno de los coches más cercanos en prestaciones a un Fórmula 1, casi como un monoplaza”, describe a más de 200 kilómetros por hora.
El ovetense pudo puntuar (9º) en el GP de Italia de F1 pese a los muchos sustos que le daba su coche por falta de adherencia en una cita que el asturiano no dudó en decir que fue «la más difícil del año» y la más exigente en lo físico.
La carrera del Gran Premio de los Países Bajos fue una prueba para valientes y es de sobra conocido que en condiciones difíciles Fernando Alonso es un maestro. En Zandvoort lo volvió a demostrar y ya en la primera vuelta, cuando las primera gotas de lluvia se dejaron ver, el asturiano se sacó un doble adelantamiento ‘de la chistera’ en la curva 3 que no dejó a nadie indiferente.
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La temporada de Alonso está siendo muy buena, seis trofeos ha llevado el asturiano al box de la escudería británica y Mike Krack tiene claro que el asturiano sigue siendo uno de los mejores pilotos del mundo. Lance Stroll también está cuajando un buen campeonato, por lo que luxemburgués no puede estar más contento con el ambicioso proyecto que está tejiendo la escudería británica.
La Fórmula 1 atraviesa una nueva etapa de dominio, de nuevo por parte de Red Bull. Así, la temporada 2023 está siendo un tanto monótona con la superioridad apabullante del equipo austriaco y especialmente de Max Verstappen. Durante la primera mitad del curso, han sido los únicos que han conseguido una victoria.
Entre los topicazos de la Fórmula 1 sobresalen dos: ‘eres tan bueno como tu última carrera’, así que en el parón de verano se puede vivir de las rentas de Spa; y ‘el único rival contra el que se puede comparar es el compañero de equipo’. Pues bien, la clásica comparativa entre compañeros arroja igualdad máxima en Ferrari después de doce grandes premios: Leclerc bate por un margen mínimo a Sainz en clasificación (8-7) y carreras (8-7) y suma el 51,8% de los puntos de Ferrari, siendo para Carlos el otro 48,2%. En ninguna otra escudería de las cuatro ‘top’ se acercan a esas cifras. Al contrario, los números revelan que la ventaja en puntos de Verstappen sobre Pérez no es tan diferente de la que mantiene Hamilton sobre Russell. Y es muy inferior a la que ha establecido Alonso sobre Stroll en esta primera parte de la temporada 2023.
El campeonato de 2007 será difícil de olvidar para el aficionado de Fórmula 1. Fernando Alonso venía de ser campeón en 2005 y 2006. La temporada siguiente cambió de escudería tras el acuerdo con McLaren, que le juntó con un joven Lewis Hamilton. El británico no tenía experiencia en la categoría reina, pero desde el primer momento forjó una intensa rivalidad con el asturiano.
No hace falta tirar de mucha memoria: en el primer lunes del agosto sin Fórmula 1 de 2022, Alonso anunció su fichaje por Aston Martin y todo saltó por los aires. Doce meses después, el balance de la primera mitad de temporada 2023 para el asturiano es simplemente de sobresaliente: seis podios, tercero en el Mundial, delante de Hamilton, de Ferrari, no tan lejos de Checo Pérez… es cierto que en el segundo tercio de la campaña McLaren se ha colado (no fue así en Bélgica) y Mercedes se ha marchado. Pero hay margen, llegarán evoluciones tras el parón y hay diez carreras por delante para apuntalar lo que Fernando denomina “año de preparación” para 2024.
Aston Martin necesitó dos rotondas para pasar página en Silverstone, llegar a la nueva fábrica y ponerse manos a la obra para recuperar el pulso de los podios ante la segunda mitad de la temporada. En Gran Bretaña sufrieron por falta de eficiencia en las rectas y curvas rápidas (en clasificación fueron el cuarto coche con motor Mercedes, mal síntoma), pero vienen pistas como Hungaroring que deben servir para extraer más ritmo del AMR23. Lo explica Tom McCullough, ingeniero jefe de ‘performance’ en el equipo de Alonso y Stroll: “Para ser fuerte en Silverstone necesitas ser rápido en curva rápida, en curva lenta y en rectas. Entre las curvas siete y diez tienes dos kilómetros a fondo. Esta pista no tiene mucha curva de media velocidad”.
El Madrileño es el único capaz de seguir a Max en los Libres 2, por lo que podría estar al caer la victoria española numero 34, mientras Fernando sufre al desprenderse una pieza de los frenos delanteros, lo cual no le quita que si se arregla todo, no estaría lejos de alcanzar su victoria 33 tan esperada y deseada.
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La emoción en la Fórmula 1 viene dada por los adelantamientos. Los pilotos se enfrentan cada fin de semana por ver quién es el más rápido y a quién le tiembla menos el pulso a la hora de recortar posiciones. En esto, Fernando Alonso es todo un experto, lo ha demostrado siempre, con sus mejores coches y también con esos que no han sido tan buenos.