Massimo Rivola, exdirector deportivo de Ferrari, repasa la etapa del asturiano en Maranello y resalta su capacidad para leer carreras: «Lo sabía todo»
Massimo Rivola dejó atrás gran parte de su vida con un cambio insólito en ese momento, que le permitió abandonar su aventura en la F1 para empezar una nueva carrera en MotoGP. El exdirector deportivo de Ferrari y actual CEO del departamento de carreras de Aprilia en MotoGP, comenzó su andadura en el Gran Circo como miembro de márketing de Minardi en 1998. Durante esa etapa tuvo su primera toma de contaco con un Fernando Alonso que debutaba en el equipo y tras pasar por Toro Rosso como director deportivo, el italiano se reencontró con el español ya convertido en bicampeón, en las filas de la Scuderia.
Ambos coincidieron en Maranello durante toda la etapa que vivió Fernando como piloto (2010-2014), pese a que Rivola llegó dos años antes que el asturiano al equipo. Y aunque podría haber sido otro piloto más en la lista, Alonso fue de los que dejó huella gracias a una capacidad para leer carreras que no dejó indiferente al italiano como reconoce en Il Foglio: «Nunca he visto a nadie leer una carrera como lo hacía él. En algún momento nos hizo sentir literalmente como idiotas en el muro de boxes, ya que lo sabía todo».
Las palabras del exjefe de Ferrari dejan entrever que el asturiano no solo estaba centrado en pilotar, sino también en buscar una estrategia perfecta que mucho podría haber cambiado la historia en el final de 2010: «Nosotros teníamos delante muchos monitores con datos, pero a menudo él llegaba a algunas conclusiones antes que nosotros. Y eso que también estaba haciendo su trabajo en el coche».
Pese a que se le resistió el Mundial, el trabajo del equipo y el talento de Fernando le permitieron pasar a la historia de la ‘Scuderia’ con once triunfos. El asturiano se marchó siendo el segundo español que compitió en carrera con Ferrari y hace tan solo uno año, Sainz subió a tres esa cifra en una temporada donde terminó como el mejor en Maranello, a pesar de la confianza que el equipo tenía en Leclerc. Lo que no sorprendió a un Rivola, que siempre creyó en él: «Las buenas actuaciones de Carlos no me sorprenden. Durante mucho tiempo recomendé ficharlo. Siempre ha sido muy fuerte, es rápido e inteligente«.
Vía As.com
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Habría sido increible que hubieran pilotado Alonso y Sainz en Ferrari, pero con un coche que fuera competitivo, creo que el resto de escuderías habrían quedado ensombrecidas hasta la médula.