Una vuelta por Yas Marina
La siguiente una cerrada horquilla de la mitad, estará presidida por unas impresionantes gradas que envuelven la pista, donde se sentirá (más que en ningún otro lugar) el calor de la afición. Si de algo peca este trazado es de las pocas vías de escape que se le han instalado: si un piloto comete un error, acabará, probablemente, chocando contra el muro de protección.
La primera mitad de la vuelta, hasta la curva nueve, es típicamente el nuevo estilo de pista.Existe una sesión rápida al comienzo, desde la curva 1 hasta la curva 4, donde las tribunas están literalmente sobre la cabeza de los pilotos; esto permite darle al espectador una gran visión del lugar.
La sección trasera del circuito será para los pilotos como conducir en un circuito urbano.Hay que sortear una serie de curvas de noventa grados tanto para la izquierda como para la derecha.En el final de la vuelta hay una curva de media velocidad que lleva a la recta principal.
Las Cifras con las que se construyó el circuito de Yas Marina
Muchos os preguntaréis por qué un pequeño emirato invierte todo este potosí en un circuito de Fórmula 1. La respuesta es muy simple: el petróleo se acaba. Necesitan otra fuente de ingresos para un secarral que antes de 1958 (fecha en la que descubrieron que había petróleo bajo sus pies) vivía solo de la pesca, la cría de camellos y las perlas.
El objetivo es sustituir los ingresos del petróleo por el turismo y la F1 es un gran escaparate para lograr convertir Abu Dabi en un destino atractivo. Dubai, otro de los siete que forman los Emiratos Árabes Unidos (EAU), comenzó hace algunos años con esta apuesta y ahora es el destino de muchos ricos occidentales que han comprado propiedades allí.