McLaren y los colores del MP4-31… Un secreto de estado

McLaren pide a sus empleados en Woking que no desvelen ningún detalle sobre la decoración del MP4-31

Que hay hambre de Fórmula 1 es un hecho. Cuando faltan 20 días para empezar a ver los nuevos monoplazas de 2016, se disparan las especulaciones sobre cualquier tema que afecta al Gran Circo, incluso los en apariencia menos trascendentes, como la decoración de los coches.

Desde hace unas semanas se habla de un posible cambio de colores en el McLaren Honda MP4-31, el nuevo monoplaza de Fernando Alonso y Jenson Button. Se ha sabido que a los empleados les han pedido en Woking de forma expresa que no revelen ningún detalle sobre el aspecto externo del monoplaza. "También es posible que no cambie nada", aclara la misma fuente.

El año pasado, el MP4-30 se presentó con una mezcla de plata en la parte superior y negro en los laterales, desde el morro hasta la zaga. Esas tonalidades cambiaron luego para el GP de España, a primeros de mayo, desterrando cualquier reminiscencia del 'silver' tradicional de Mercedes en las carreras, desde principios del siglo XX.

Ron Dennis explicó en su día el debate interno que hay en la fábrica sobre el asunto y cuál es su postura, que es la que finalmente se impone. "Hay gente que dice en Woking, ¿por qué no lo pintamos de naranja? Y yo les contesto, ¿por qué?. Ese fue el color antiguo de McLaren, ¿por qué diablos debemos volver hacia atrás?", argumentaba.

Dennis explicó la prioridad en este tema. "Los colores sólo van a cambiar por razones comerciales. No lo puedo cambiar sólo para unas pocas personas en la empresa, que serían más felices si lo pintamos de naranja o de amarillo. Hasta ese momento en que haya una razón comercial, llevaremos un diseño elegante en el que destaque nuestro actual color, el rojo fluorescente", sentenciaba.

Ese diseño postulado por el presidente del Grupo McLaren es el anodino negro y rojo que tan poco atrajo a los aficionados en 2015. Y si se habla de razones comerciales, Moet (la firma de champán) es la única incorporación conocida para 2016. El mono de Vandoorne la tenía un espacio negro decorado con estrellas doradas en la zona del pecho, en las prueba de Paul Ricard. Como en Francia está prohibida por ley la publicidad de tabaco y alcohol en el deporte, es probable que en Montmeló ya aparezca el nuevo logo.

En el coche, la de Moet-Henessy es una aportación de las consideradas menores, que puede ser de menos de 8 millones de euros. Dennis sigue estimando que, para cambiar los colores de 'su' coche -o al menos el de los pontones laterales o la tapa del motor-, es necesario que el sponsor llegue con un cheque de 45 millones. Posiblemente por eso su bólido es uno de los más limpios de la parrilla.

Vía Marca.com