En 2050 el Mundial celebrará su centenario y los ingenieros de McLaren Applied Technologies han imaginado cómo serán las carreras del futuro
Mientras algunos se están devanando los sesos buscando la forma más adecuada de mejorar el espectáculo de la Fórmula 1 con el próximo cambio de reglamentación en 2021, hay otros que van más allá, mucho más allá de hecho. En 2050 el Mundial celebrará su centenario y los ingenieros de McLaren Applied Technologies, la parte tecnológica del grupo británico, han imaginado cómo serán las carreras del futuro con un exhaustivo estudio basado en las tendencias que están surgiendo en la actualidad, y el resultado no puede ser más increíble.
Estas son las premisas básicas: monoplazas eléctricos con una velocidad punta de 500 km/h, copiloto inteligente a bordo, aerodinámica activa, circuitos urbanos emocionantes con grandes peraltes, apoyo estratégico de los esports e investigación exhaustiva de los gustos de los fans. Los coches no volarán, seguirán teniendo cuatro ruedas y siendo pilotados por personas, pero ahí es donde acaban las similitudes con la actual F1. Se espera que toda esa combinación de factores evolucione en carreras completamente diferentes.
Piloto y coche seguirán siendo el dúo protagonista de la competición, el factor humano será igual de importante, pero ambos sufrirán cambios. Empezando por la máquina, será capaz de adaptar su forma según le convenga gracias a una aerodinámica activa. Así, el MCLExtreme, el concepto que han diseñado en Woking, tendrá unos sidepods que se expanden y contraen como las branquias de un tiburón blanco: en las rectas será una bala de 500 km/h y en las frenadas se expandirá para tener más control y estabilidad.
En cuanto a los pilotos, tendrán que habituarse a rodar con un socio en el cockpit,una IA con la que estarán conectados por sensores en el casco y el mono. Este copiloto inteligente podrá leer sus emociones y su estado mental para predecir sus preferencias y proporcionarles estrategias en tiempo real que se les mostrará en un display en la visera. Las novedades no acabarán ahí, continúan con un mono con tecnología inteligente que se inflará o comprimirá según la Fuerza G para evitar que se acumule la sangre en las extremidades.
Coches, pilotos, ¿qué faltan? Los circuitos. Serán urbanos para llevar la competición a la gente, más largos, más anchos y con grandes peraltes para dar fluidez en las curvas de 90º. Tendrán gradas transparentes y un e-pitlane con carga inductiva para recargar las baterías (en 30 segundos se podrían cargar al 50%), cuanto más despacio se pase más se carga. Además, chasis que cambian según las emociones del piloto, ruedas que se reparan solas, sistemas para robar energía… Eso es lo que ve la bola de cristal de McLaren. ¿Será la unión de F1 con Fórmula E?
Fast. Predatory. Instinctive.
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— McLaren Applied (@McLarenApplied) January 23, 2019
Vía As.com
