El choque con Raikkonen le dejó el alerón tocado y los problemas de entrega de potencia del propulsor Renault hicieron que tuviera las cosas mucho más difíciles
Según ha podido saber AS, el madrileño consiguió puntuar pese a un déficit de medio segundo en su monoplaza, que en algunos momentos llegó a ser incluso más. Les contamos la razón. O razones. Primero porque tras el toque con Kimi, el finlandés se quedó parado para esquivar a Vettel, se quedó con el alerón tocado y eso ya le provocó continuar con casi cuatro décimas de desventaja. El alerón dirige el aire sobre los neumáticos y hacia la parte trasera, tal y como lo tenía Sainz se quedó sin diez puntos de aerodinámica y eso se traduce en ese tiempo.
Pero además los problemas de entrega de potencia de la unidad de Renault de su Toro Rosso le penalizaban cada cierto tiempo, más de una vez aceleraba y no respondía el coche y en otras lo hacía de manera descontrolada. Pero hubo más. Tras el coche de seguridad estuvo varias vueltas con el mapa de motor equivocado, en modo ahorro de combustible, y hasta que lo pudo cambiar le pasaron como un avión, Ricciardo, Nasr y Raikkonen. Y el pitstop de más de un minuto. Y ya al final Ericsson le pasó con las gomas más frescas. Todo es pasado, ahora antes de Malaisia, se entrena junto a su preparador físico. Trabajo, trabajo y trabajo…
Vía As.com