Fernando Alonso mantiene vivo el Mundial tras ser segundo en el GP India

La victoria ha sido de Vettel

Gran carrera la vivida sobre el trazado de Buddh y gran carrera la protagonizada por Alonso, que le llevó a terminar segundo a pesar de que empezaba quinto. Sólo Sebastian Vettel pudo soportar el gran ritmo del asturiano en carrera y sumar su cuarta victoria consecutiva para ponerse a 13 puntos de Fernando a falta de tres carreras para el final del Mundial.

Espectacular. Ésa es la palabra que mejor define la actuación de Fernando Alonso en el GP de India 2012. Una actuación irreprochable, mágica, un pilotaje que sólo Sebastian Vettel pudo superar. El asturiano ha terminado segundo, justo por detrás del alemán de Red Bull, pero por delante de Mark Webber y de los dos McLaren a pesar de empezar por detrás de ellos al comienzo de la prueba, y después de otra salida magistral a la que nos tiene acostumbrado en la que tardo poco en comerse a los dos McLcaren casi a la par, "Chapó por Magic".

Trece puntos tiene Sebastian de ventaja en el Mundial sí. Pero el hecho de ver a Vettel un poco más lejos no quita mérito alguno ni empaña la gran carrera que ha realizado el asturiano desde que se ha apagado el semáforo hasta que ha cruzado la bandera a cuadros. Porque desde el mismo instante en que ha recorrido los primeros metros con su Ferrari no tenía otra idea en su cabeza que la de sumar lo máximo posible.

Y lo logró. Lo logró gracias a un gran ritmo, al espíritu luchador que ha caracterizado a Fernando desde el primer momento en que se subió a un monoplaza de F1, que le llevó a levantar dos Mundiales y a estar peleando por un tercero contra un monoplaza superior como es el Red Bull con un coche a priori menos poderoso que el de las bebidas energéticas.

Los McLaren cayeron pronto ante Alonso
Porque sólo Vettel pudo con él, porque ni los McLaren ni Webber pudieron parar esas ganas de Alonso, un Alonso que se deshizo de Hamilton y de Button en las primeras vueltas con una facilidad pasmosa, con una velocidad punta impresionante que hacía pensar que el Ferrari iba despegar de la trazada de Buddh y a salir volando por el cielo de la India.

Pero el vuelo no era por el aire, era por el suelo. Por la pista india, una pista que recordó mucho a lo sucedido en Corea cuando Fernando se puso en persecución de los dos Red Bull, cuando se colocó detrás de Webber mientras Vettel se iba vuelta a vuelta cada vez más y se separaba del asturiano de Ferrari y de su compañero australiano.

Y si Sebastian se separaba, Alonso se acercaba. Al menos a Mark, un Mark que se puso a jugar con los tiempos como ya hiciera en Yeongam y que cuando parecía que podía ver peligrar su posición apretaba. Pero a diferencia de lo ocurrido en Corea el juego le salió mal tras la primera y única parada en boxes para poner los duros, porque nada más salir la mancha roja que veía por sus retrovisores era más grande que nunca.

Sin KERS, Webber sucumbió ante Fernando
Tan grande era que llegó el momento en que no necesitó los retrovisores para poder ver a Fernando, porque Fernando le pasó, le adelantó. Y lo hizo gracias a esa velocidad punta que ya demostró en las primeras vueltas, y gracias al DRS. Y también debido a los enormes problemas del Red Bull de Webber que, sin KERS, era mucho menos Red Bull.

Segunda posición, lo máximo a lo que se podía aspirar. Porque Vettel se encontró con otra de esas carreras que le gustan, que le encantan. Una, otra más, carrera sencillísima para el alemán sin coches ni delante ni detrás en lo que de lo único se tuvo que ocupar fue de cuidar sus neumáticos, unos neumáticos que le duraron bastante, y de no cometer errores en pista ni de tener problemas, innecesarios por su ventaja, en su monoplaza.

No los tuvo, y estuvo a punto. Porque su coche rozaba en exceso con el asfalto de Buddh y unas chispas a falta de siete vueltas hicieron pensar más que nunca en el milagro. Un milagro que finalmente no se produciría y que aún sin producirse deja el Mundial abierto a todo gracias al segundo puesto de Alonso. Un Mundial que ya es más que nunca un mano a mano entre el español y el alemán.

Mano a mano por el Mundial
Porque Raikkonen no da para más en su regreso a la F1. Kimi no pudo con un Massa con problemas de gasolina debido a la mala elección del finlandés de su séptima velocidad, demasiado corta para un circuito con largas rectas como es este de la India. Quizá sea cierto que el de Lotus prefiere quedar cuarto y que sea Hamilton o Webber los que vayan a la gala de los tres primeros del Mundial…

Y es que Lewis ha vuelto, a pesar de su mala salida en la que perdió la plaza con Fernando. Pero ha vuelto, y casi regresa incluso al podio de haber tenido un par de vueltas más. A punto estuvo el británico de superar a Webber y formar un podio de Red Bull, Ferrari y McLaren, escudería que ha vuelto al juego a falta de tres carreras y que tiene el 'premio' de la vuelta rápida de carrera de Jenson Button.

Abandonos de Pérez, De la Rosa y Schumacher
Cómo le habría gustado a Michael Schumacher poder haber hecho esa vuelta rápida. O al menos haber visto la bandera a cuadros. El heptacampeón no está desde que se anunció su retirada y de nuevo un incidente, otro más, le ha lastrado la carrera. Toque con Vergné, parada en boxes por un neumático pinchado y adiós a la India. Se retiraría casi al final, pero su cabeza estaba tan lejos de Buddh que se saltó unas banderas azules.

Tampoco Sergio Pérez recordará con cariño este Gran Premio. El mexicano ha tenido un fin de semana en el que quizá hubiera preferido quedarse descansando y reposar su resfriado que montarse en su Sauber. Tras no participar en los Libres 1, el azteca ha tenido un toque con Ricciardo que le hizo quedarse sin neumático trasero izquierdo justo cuando los acababa de cambiar. Otro abandono.

Y a De la Rosa también le tocó la ruleta rusa de las pocas retiradas que ha habido en Buddh. El de HRT tuvo un problema de frenos que le hizo trompear en una curva y verse con su monoplaza encallado en las afueras de la trazada, haciendo imposible su regreso a pista. Karthikeyan, por su parte, ha quedado último.

Con 75 puntos en juego cualquier cosa puede pasar, y si Vettel ha podido ganar cuatro carreras seguidas por qué no iba Alonso hacer pleno en las últimas tres pruebas que quedan para la finalización del campeonato. Pronto lo veremos, de momento el Mundial sigue vivo y en Abu Dabi habrá otro intento, el tercero, para que el asturiano vuelva a ponerse al frente de un liderato que se merece tener viendo lo visto a lo largo de la temporada.

Vía Antena3f1.com