Pepe Martí se vio perjudicado por el Safety Car y se va de Imola sin sumar puntos
El Gran Premio de Imola dejó un sabor agridulce para Pepe Martí, que no logró sumar puntos en un fin de semana marcado por la estrategia y los incidentes. En contraste, Alex Dunne aprovechó al máximo una carrera caótica para alzarse con una victoria muy trabajada, cimentada tras un oportuno coche de seguridad. Dino Beganovic, que partía desde la pole, y Luke Browning completaron el podio en una prueba donde la gestión de neumáticos y las paradas en boxes resultaron decisivas.
La salida volvió a dejar una víctima habitual: Víctor Martins quedó fuera de combate casi de inmediato por problemas con el embrague, un fallo recurrente que también afectó a Dunne, obligado a esquivarlo en los primeros metros pese a partir desde la tercera posición.
Martí, por su parte, arrancó con buen pie. El piloto de Campos Racing ganó una posición en los primeros compases y se colocó décimo, con ritmo para pelear por los puntos. Ya en la tercera vuelta superó a Roman Stanek, ambos rodando con el compuesto duro, una elección que marcó su estrategia. El objetivo era claro: avanzar mientras cuidaba los neumáticos y gestionaba el aire sucio en una parrilla tan igualada como la que presenta este inicio de temporada.
Mientras tanto, Beganovic lideraba con firmeza, seguido de Leonardo Fornaroli y Arvid Lindblad. La tensión crecía detrás: el piloto de DAMS no ocultaba su frustración por tener delante a Victor Martins, a punto de ser doblado. Consideraba que le estaba haciendo perder tiempo valioso, aunque el francés mantenía un ritmo competitivo.
La primera oleada de paradas llegó en la vuelta 7, protagonizada por los pilotos con el neumático blando. En el caos del pit lane, Fornaroli cedió posición frente a Lindblad para evitar un ‘unsafe release’. La pérdida de tiempo fue generalizada. Jak Crawford –ganador del sábado– y Browning entraron una vuelta más tarde.
Ese movimiento de piezas situó a Duerksen y Martí en cabeza de forma virtual. El catalán, con aire limpio tras adelantar a Joshua Dürksen, mantenía vivas las esperanzas de un resultado destacado. Browning intentó un ‘overcut’ sobre Beganovic y lo logró, pero un incidente en pista con su propio compañero de equipo lo relegó, permitiendo a Dunne capitalizar la situación.
Desde ese punto, la carrera se dividió en dos estrategias: los que ya habían parado, y los que aún debían hacerlo. Martí lideraba el segundo grupo, perseguido muy de cerca por Joshua Duerksen, lo que le hacía perder ritmo. La parada obligatoria se acercaba —calculada en torno a la vuelta 29— y el colchón con el grupo perseguidor empezaba a evaporarse. En solo unos giros, Dunne (virtual líder) redujo de 38 a 33 segundos la diferencia con Martí.
La maniobra decisiva llegó en Tamburello, donde Duerksen superó al piloto español poco antes de que un accidente de Rafael Villagómez provocara la salida del coche de seguridad en la vuelta 16. El momento era ideal para los líderes virtuales… pero no para quienes aún debían pasar por boxes: el compuesto superblando no garantizaba durabilidad suficiente hasta el final.
La bandera verde ondeó al final de la vuelta 19. Martí presionaba a Duerksen, reclamando incluso que lo había adelantado bajo doble amarilla. Sin embargo, los comisarios no actuaron, y el español continuó atacando sin éxito.
Dunne, quinto en ese momento, ya era el líder virtual de la prueba. Incluso adelantó a varios pilotos que aún no habían hecho su parada, reafirmando su dominio. A falta de estrategia salvadora, tanto Martí como Duerksen prolongaron su stint esperando un nuevo coche de seguridad que no llegó.
Finalmente, el paraguayo paró en la vuelta 30. Martí lo hizo en la siguiente, cuando ya era evidente que los pilotos de cabeza estaban recortando terreno a gran velocidad. El resultado: ambos cayeron a las últimas posiciones.
Dunne se escapó y selló una victoria impecable, construida con cabeza fría, ritmo y una lectura táctica perfecta. Buena carrera también de Richard Verschoor, que se consolida en la tercera plaza del campeonato con 55 puntos. El gran perjudicado, sin duda, fue Pepe Martí, que ahora se ve obligado a remontar en lo que queda del exigente triplete de carreras.
