El tetracampeón del mundo no ha podido pasar de la cuarta posición de parrilla en un circuito en el que los Ferrari han ido cuesta arriba casi desde su llegada. Más dudas para los de Maranello
Ha sido un invierno lleno de promesas para la 'Scudería', palabras que no terminan por traducirse en resultados, superadas por un invitado inesperado en esa zona de confort que los italianos han construido ante el dominio implacable de Mercedes en las pasadas temporadas.
Que Mónaco iba a ser un Gran Premio complicado se sabía de antemano, pero la máxima aspiración del podio se ha complicado en la clasificación, en la que Vettel no ha podido pasar de ser cuarto y en la que Raikkonen ha quedado relegado a la undécima.
"El coche va cada vez peor", espetó el alemán por radio mientras regresaba a boxes algo frustrado. Debió asociarla incluso a algún sonoro taco, pues la FIA pisó su voz con un pitido de los que tapan las palabras soeces o inapropiadas. Ferrari deberá correr a la contra hoy y las pocas esperanzas están en "la posible lluvia que podría ayudarnos y cambiarlo todo". Muy parecido a lo que dijo ayer Alonso sobre su progreso en carrera.
Algo más calmado al bajar del coche, el tetracampeón cree que hoy había posibilidades de haberlo hecho mejor: "Deberíamos y podríamos haber hecho un mejor trabajo, pero ahora toca centrarse en mañana. No creo que nos encontremos tan lejos como parece, y teníamos oportunidades de lograr la 'pole' hoy, pero no sacamos lo mejor de nosotros mismos".
Pese a no tener dudas sobre la velocidad del SF16-H, 'Seb' teme que este se quede estancado durante la temporada: "El coche es rápido, de eso no hay dudas, aunque a diferencia de todos los demás, nosotros no mejoramos. No hay nada especial que hayan hecho los de delante que no podríamos haber hecho nosotros, pero no lo hicimos, y eso es un problema", zanjaba.
Vía Marca.com