La separación entre el turbo y el compresor
Normalmente, ambos van montados unidos junto al bloque motor. En el caso del propulsor de Mercedes, uno y otro están separados y en lados opuestos. Esta distribución permitiría una concatenación de repercusiones técnicas que incluso llegan hasta la configuración aerodinámica del monoplaza.
Un esquema diferente
En el esquema convencional, los gases de cada cilindro escapan a través de diferentes tubos individuales que confluyen en un único final, donde está situado el turbo y el compresor. Los gases activan la turbina que gira a velocidades endiabladas, a su vez unida por un eje al compresor, elemento que, como su nombre indica, comprime los gases que vuelven a introducirse en el motor para proporcionar potencia extra. Pues bien, Mercedes une compresor y turbo, ahora separados, a través de un eje entre la V que forma el motor. Y, a partir de aquí, las supuestas ventajas.
Mejor funcionamiento del turbo, menor uso de energía eléctrica
Situado en la parte delantera del motor, el compresor está rodeado de niveles de temperatura muy inferiores a los de la zona ‘trasera’ donde se ubica el turbo. La entrada de aire situada encima del piloto refrigera mejor al compresor. El aire comprimido ha de ser refrigerado antes de entrar en el motor, así que este posicionamiento ayuda a una mejor respuesta del turbo.
Ahorro de espacio, mejor aerodinámica
A la vez, el compresor situado delante ahorra espacio al configurar escapes más cortos, permitiendo un mejor 'empaquetamiento' del monoplaza. Además, Mercedes puede utilizar refrigeradores del sistema aire-agua, más pequeños y compactos que los tradicionales de aire que utilizan los demás equipos con motores Mercedes. El de aire es el más efectivo, pero el sensor de caudal que controla consumo y potencia ha permitido escoger una solución de compromiso, con los consiguientes beneficios aerodinámicos.
A mejor recuperación y gestion de la de energía eléctrica, menor uso de combustible, que puede utilizarse para generar más potencia. De modo que con placas de refrigeración más pequeñas pueden reducirse los pontones laterales, así como las entradas de aire. Y al mejorar el coeficiente aerodinámico también influye en el consumo. Además, con más espacio ‘interior’ gracias a desplazar el compresor a la parte delantera del motor también se puede hacer otro tanto con el conjunto de los engranajes del cambio, mejorando el reparto pesos y centro de gravedad que ayudan al comportamiento del monoplaza.
La importancia de acertar desde el principio con los conceptos técnicos
En esta nueva era, a mejor recuperación y gestion de la energía eléctrica menor uso de combustible, que a su vez aprovecharse para generar más potencia en la parte térmica. Aerodinámica, frenada y acumulación de energía, entrega de potencia térmica y eléctrica y su influencia para el pilotaje,…Hoy más que nunca, un monoplaza se ha convertido una compleja red de sistemas de diferente naturaleza interrelacionados entre sí. Y conceptos técnicos aparentemente poco espectaculares puede producir grandes diferencias en el conjunto.
De todas formas, las virtudes del W05 no pueden simplificarse de forma tan sencilla. Porque si la clave del éxito de Mercedes se basa en conceptos técnicos como el apuntado, sorprende que resulte tan crucial y no haya sido también recogido por otros fabricantes. En todo caso, confirmará la importancia de acertar desde el principio en la concepción del motor, como parece ser el caso del equipo y fabricante alemán.
Ojala el espectáculo en la pista acabe siendo tan fascinante como el reto tecnológico que se esta viviendo hoy en día en la Fórmula 1.
Vía Elconfidencial.com