• vie. Abr 26th, 2024

Ayrton Senna se hubiera horrorizado con algunos cambios de Imola

«Ellos se dieron cuenta de que el desafío de la F1 es el riesgo y la dificultad, y quizás la penalización por los errores», afirma el campeón de 1996

Fórmula 1: Imola, el circuito maldito de Ayrton Senna y odiado por Alan  Jones, el duro entre los duros

Lamento decirlo, pero la pista se cambió después de 1994 y, aunque no podemos decirlo con certeza, creo que si Senna y Ratzenberger pudieran regresar hoy, se horrorizarían con algunos de los cambios». Esta es la reflexión que ha realizado Damon Hill en el podcast ‘F1 Nation’, tras analizar la victoria de Max Verstappen en la región de Emilia Romaña, para mostrar su desacuerdo con las diversas modificaciones que el circuito de Ímola ha sufrido estos años atrás para mejorar su seguridad desde aquel fatídico GP de San Marino 1994 que terminó con la vida de Ayrton Senna y Roland Ratzenberger.

Hill defiende su tesis argumentando que la Fórmula 1 es riesgo, dificultad y penalizar los errores que cometa un piloto y pone como ejemplo la configuración del trazado de Suzuka donde una inmensa mayoría de escapatorias son de grava: «Yo creo que Senna y Ratzenberger se dieron cuenta de que el desafío de la Fórmula 1 es también el riesgo y la dificultad, y quizás la penalización por los errores. Estoy seguro de que molestaré a algunos con esto, pero creo que es demasiado fácil si puedes cometer un error y luego volver corriendo a la pista. Si puedes llegar a una curva y la penalización es que pierdes un poco de tiempo porque has salido a la escapatoria de asfalto y puedes volver a la pista, entonces no está poniendo al piloto a prueba. Se supone que tiene que ser complicado, duro y también un poco arriesgado. No hay escapatorias en Suzuka y te diré una cosa: no se salen mucho en Suzuka».

En esta misma línea, el campeón de 1996 remarca los problemas que muchos integrantes de la parrilla del Gran Circo tuvieron para adelantar a un rival, a pesar de que se cometieron muchos fallos el pasado domingo al sureste de la ciudad de Bolonia: «La pista mostró que todos eran vulnerables y vimos una gran cantidad de errores. Pero creo que, de alguna manera, hemos perdido un poco de dificultad. Los pilotos quedaban atrapados por la dificultad de la pista, y creo que eso se puede extrapolar a la reacción de George Russell después de descubrir que no es tan fácil adelantar en una pista húmeda por el interior a 320 kilómetros por hora».

Cabe destacar que en los últimos 27 años Ímola ha sufrido importantes modificaciones en la zona de Rivazza 2, Variante Bassa, Tamburello y Villeneuve para hacer más lento su tiempo por vuelta, así como el año pasado la FIA, con Michael Masi a la cabeza como director de carrera, hizo reforzar las barreras de muchas curvas antes de regresar al calendario oficial en sustitución del GP de Canadá debido a la pandemia de la COVID-19.

Vía As.com

Advertisement
Share

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *