• vie. Oct 11th, 2024

Reunión de la Comisión de Fórmula 1 en Londres en pro del lamentable «espectáculo»

La Fórmula 1 se mira el ombligo: "Algo estoy haciendo mal"

Belgian-Grand-Prix-1965-01[1]"¿Cómo quedó la Fórmula 1? Es que vi la salida y luego apagué la tele…".

La anterior frase resulta común y hace gala de la peligrosa dinámica en la que cae con frecuencia esta competición, que es el pináculo del automovilismo. La emoción en las carreras, el espectáculo, forma parte de la aleatoriedad y del perfil del circuito, no de los monoplazas de Fórmula 1. Los cuerpo a cuerpo o los adelantamientos, la salsa de una carrera de coches, sólo está mínimamente garantizados en este 2014 en el duelo entre Mercedes. A partir de ahí, se unen otros elementos como la velocidad o el sonido que incitan a pensar a algunos que cualquier tiempo pasado fue mejor, aunque estos aspectos son palpables en el circuito, no tanto en la televisión.

Este miércoles, con la resaca de Le Mans y el ‘envidioso’ texto de Ferrari sobre la mencionada prueba de resistencia, la Comisión de Fórmula 1 (compuesta por escuderías, promotores, patrocinadores y miembros de FIA y FOM) se reunió con una serie de puntos sobre la mesa a tratar, siendo el que más afecta al aficionado el siguiente: "Mejorar el espectáculo: ¿cómo podemos hacer la Fórmula 1 más atractiva para los aficionados?". Aunque, echando un vistazo a los ciclos históricos de la F1, este aspecto no resulta novedoso.

La emoción se genera a partir de una situación, ello provoca un pensamiento y, a raíz del mismo, se establece una conducta. Una emoción positiva reforzará al individuo o aficionado a volver a buscarla, una emoción negativa (de tristeza, hastío, aburrimiento…) llevará al individuo o aficionado a alejarse de ella. ¿Qué situaciones se dan en la F1 que puedan provocar un pensamiento capaz de generar una conducta que desprenda una emoción positiva? La salida, los adelantamientos, el morbo derivado de un golpe de un rival, la lluvia o un problema en boxes suelen ir asociados a la emoción e incertidumbre de este espectáculo. El no saber qué va a ocurrir. En estos casos la emoción de la salida está prácticamente garantizada (con permiso de Mercedes), la del morbo de los golpes (afortunadamente) no y la lluvia tampoco… al igual que los adelantamientos (desafortunadamente).

Los coches no garantizan que se repitan las sorpresas de Montreal

En el pasado GP de Canadá, una de las pruebas con más emoción de los últimos años, se debieron dar accidentes, problemas en los coches punteros (Mercedes) y abandonos para que existiera el llamado espectáculo, la ausencia de lo predecible, lo sorprendente. Pero nadie garantiza que vuelvan a repetirse esa sucesión de acontecimientos para este GP de Austria, propiciados en buena parte por el perfil de la pista de Montreal.

Cuando en una entrevista de hace un año, El Confidencial preguntó al dueño de Lotus, Gerard López, qué le había enseñado la F1, éste contestó que a “tomar decisiones más rápidamente”. Y es que si de algo puede presumir el Gran Circo es precisamente de eso, reaccionar con velocidad. Tener reflejos. Y la reunión en Londres de la Comisión de F1 es una prueba de ello. Las audiencias han caído a nivel global y, como cualquier empresa, si los clientes se van… Tienen la marca, figuras mediáticas, deportistas de renombre y la historia a su favor. Hasta una exclusividad que aporta glamour… pero ansían un “espectáculo” en la pista. Porque no es raro que cuando alguien visita el paddock por primera vez durante un gran premio se quede más perplejo con lo que ocurre fuera que con lo que ve en la pista. Quieren compensar la balanza.

"Educar a un público" que quiere acción, no un libro de instrucciones

Audiencias televisivas en España (Ymedia).Audiencias televisivas en España (Ymedia).

Más allá de la emoción y espectáculo de la pura carrera de coches se encuentra el nuevo reglamento, escrito para satisfacer a los fabricantes y retomar ese impulso tecnológico y de vanguardia que siempre ha caracterizado a la F1 (y, de paso, cargarse la ‘dictadura’ de Red Bull). Sin embargo, la complejidad de las normas es tan elevada que sólo el ‘aficionado avanzado’ será capaz de ya no sólo comprender, sino encontrarlo atractivo. Porque otro de los puntos del día era: "El cambio de reglas: ¿quién tiene la responsabilidad de educar al público para reforzar la información que recibe?". Quizás, además de preguntarse quién tiene esa responsabilidad, deberían cuestionarse cómo transformar esa complejidad en algo sencillo y medir si realmente es necesario ese esfuerzo para que el gran público se enganche a la F1 a través del libro de instrucciones (quien desea leérselo, lo busca). Ya que, por ejemplo, los 1,4 millones de espectadores que comenzaron a ver esta nueva F1 a través de Antena 3 en Australia –un 59% de share-, ¿conocían el funcionamiento de los motores híbridos de un F1? ¿Lo conocían los 3,5 millones de la última carrera? La audiencia en España responde por Fernando Alonso, pero también ha adquirido (desde la aparición del asturiano, en buena medida) una cierta cultura de F1 que le permite seguir una carrera sin la imperiosa necesidad de que el ídolo local acabe primero. Pero que haya emoción, incertidumbre, espectáculo…

Internamente, en la reunión de la capital inglesa también trataron otros temas como el tope de gastos, su difusión en soportes digitales o el propio reglamento. "Algo estoy haciendo mal", ha susurrado la F1. El Gran Circo se ha planteado un cambio mirándose al ombligo… ¿y a Le Mans?

Belgian-Grand-Prix-1965-01[1]

Vía Elconfidencial.com

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2 comentarios en «Reunión de la Comisión de Fórmula 1 en Londres en pro del lamentable «espectáculo»»
    1. Pues a decir verdad de momento hay soluciones que pueden que sirvan para algo, pero en su mayoría son risorias…Ya iremos trabajando en ellas e iremos informando. Un saludo paisano y como siempre gracias por estar ahí.

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