Hamilton en periodo de reflexión y Vettel, libre para 2021. Alonso también sobrevuela la parrilla
Los seis mejores coches, para los seis mejores pilotos. ¿Es verdad? No. La Fórmula 1, como el ciclismo, es un deporte individual que se juega en equipo. Las escuderías trabajan con presupuestos que en algunos casos superan los 400 millones de euros y ningún fabricante puede permitirse que sus dos pilotos se excedan con la competencia y terminen provocando un doble abandono. Ha pasado demasiadas veces. Mercedes lo aprendió en España 2016, cuando Rosberg y Hamilton se fueron juntos a la puzolana en la primera vuelta. Red Bull lo recordó en Azerbaiyán 2018, con Ricciardo llevándose puesto a Verstappen, que tenía la misma culpa. Y Ferrari se dio de bruces en Brasil 2019 con ese choque Vettel-Leclerc que ya queda para la historia del deporte y de Maranello.
Los accidentes son sólo la punta del iceberg: las desconfianzas en un equipo con dos pilotos del más alto nivel van desde las telemetrías compartidas a la elección de la estrategia, generando un ambiente complejo en un deporte que ya de por sí lo es. Sirva eso para explicar que Bottas sea el escudero de Hamilton y que a Binotto le entren sudores fríos cada vez que Vettel y Leclerc se encuentran en la pista. Red Bull lo tiene en cuenta a la hora de escoger a sus dos pilotos: la alineación parece que cojea con Verstappen (22 años, siete victorias), consagrado en su sexta temporada de F1 como alternativa a Hamilton, y Albon (23 años), un piloto de segundo año sin triunfos, podios ni poles con un coche muy capaz de hacerlos.
Pero Christian Horner subraya, en un evento de los energéticos en Londres, que ni el hexacampeón británico tendría sitio. «No encajaría en nuestro programa. Tenemos a Max, siempre hemos mantenido la política de invertir, nutrir y desarrollar el talento joven y Lewis no encaja en eso. Es difícil ver a dos pilotos alfa en un equipo, puedes ver los problemas que ha tenido Ferrari. ¿Por qué iba a ser distinto en Red Bull?», opina el británico, ahora que Lewis afronta un periodo de reflexión antes de renovar con Mercedes. Y no es un caso exclusivo: «Lo mismo con Lewis en Ferrari y con Lewis en Red Bull. Es una dinámica difícil, especialmente en una competición tan apretada». Hace pocos días era Helmut Marko quien, en una entrevista con Motorsport Magazin, descartaba a Vettel como posibilidad señalando a la imposibilidad financiera, porque Verstappen ha renovado al alza hasta 2023.
Seb acaba contrato en 2020, igual que Lewis, pero cuando se habla de gallos en la F1 también hay que pensar en Fernando Alonso, que considera el regreso en 2021. Está aprovechando el tiempo lejos del ‘Gran Circo’ (doblete en Le Mans, campeón del WEC, ganador en Daytona, fue al Dakar, volverá a la Indy…), pero si se pone a tiro un coche ganador será factible su vuelta. Liberty ya ha insistido a Red Bull, quieren hacer sitio a toda costa a uno de los más grandes de su deporte, pero las sugerencias no han sido escuchadas recientemente. Parece difícil que se abran las puertas en una fábrica de las que hoy mismo pueden ganar carreras. Sin embargo, no es imposible: las escuderías pasan por ciclos y las victorias, o precisamente la falta de triunfos, pueden obligar a las direcciones a tomar decisiones en busca de talento. Por eso Ferrari subió a Leclerc, aunque eso desestabilizara a Vettel. Nadie quiere dos pilotos alfa, pero algunas veces no queda más remedio.
Vía As.com
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