• Dom. Sep 7th, 2025

Triunfo de Verstappen sobre los McLaren en casa de Ferrari, mal día para los españoles / Crónica GP Italia circuito de Monza

Victoria del campeón en Monza por delante de Norris y Piastri, enredados por una mala parada en boxes. Duro abandono de Alonso y otro ‘cero’ de Sainz, 11º

Qué carrera, qué primeras vueltas, que de luchas, si señor fueron 53 vueltas pero se hicieron cortas muy a pesar de que lo mejor sucedió al principio de la misma. Luego como siempre fueron momentos de estrategias y alguna que otra incidencia e incluso adelantamientos y salidas, hasta el punto de que más de un piloto ya tenían advertencias y otros terminaron sancionados.  El caso es que buena suerte para unos, mala para otros, entre ellos a los nuestros, tristeza para los tifosis que ninguno de sus dos coches rojos subieron a lo más alto del cajón, pero sobre todo y principalmente gana el espectáculo que nos hizo, al menos esta vez, ver una carrera algo más entretenida de lo que últimamente estamos acostumbrados.

En un puñado de meses perderá el título de campeón del mundo en favor de uno de los McLaren, pero ninguna cuenta de puntos, ningún trofeo, en definitiva, desplazará a Verstappen del Olimpo de la Fórmula 1 contemporánea. El holandés venció el GP de Italia con máxima solvencia contra coches más fuertes y destapó las vergüenzas del equipo que domina la temporada con un adelantamiento agresivo por el exterior a Norris en la Primera Variante y un ritmo machacón que dejó fuera de juego a los dos pilotos que se disputan el título. Se le esperaba peleón, delante, pero no dominante. Dejó fuera de juego a los McLaren hasta el punto de que cometieron un grave error en el ‘pit-stop’ de Lando. Max cruzó bajo la bandera a cuadros con una escalofriante ventaja de 19 segundos para firmar su tercera victoria de 2025.

Aunque sufrió en la salida. La arrancada de Verstappen no fue mala, pero en los primeros metros perdió su ventaja sobre Norris. El inglés no tomó buenas decisiones, porque terminó con una rueda en la hierba, pero la inercia le bastó para poner bajo presión al Red Bull en la primera frenada y obligarle a saltarse la curva para no perder la posición. Los comisarios no lo vieron con buenos ojos, así que Red Bull le pidió a su piloto que devolviera la posición. La sorpresa fue que el liderato no dio pista libre a Lando. Max no dejó de presionar, mantuvo el DRS, adelantó en la cuarta vuelta sin posar una rueda fuera del asfalto y empezó a marcar vuelta rápida tras vuelta rápida en aire limpio. McLaren ya no le vio. Tras ellos se formó un tren divertido con Leclerc (que batalló con Piastri hasta que se le marchó del todo), Russell y Hamilton. Ninguno de ellos aspiró realmente al podio.

Como no hubo coches de seguridad ni incidentes aparatosos, la ventaja que construyó Verstappen fue definitiva. Retrasó mucho su parada porque jugaba con ocho segundos de ventaja y no tenía necesidad de exponerse en caso de safety car o bandera roja. Paró en la vuelta 38 (de 53) y cedió temporalmente el liderato. Norris y Piastri aguantaron, pero nada extraordinario sucedió. Si acaso, que McLaren pecó de intervencionista: pararon primero al australiano, que iba detrás, y después se atascaron con una rueda en el ‘pit-stop’ del inglés. Así que perdió la posición con su compañero de equipo, ¡en plena lucha por el título! Para enmendarlo, ordenaron a Piastri que dejara pasar a Norris. Lo hizo, y no pudo volver a disputarle la plaza. Pero espetó por radio: “Dijimos que una mala parada es parte de las carreras, no sé qué ha cambiado”. Tampoco es mal balance para el líder: cede tres puntos y mantiene 31 de ventaja sobre Lando en una carrera peligrosa, porque pudo colarse un coche entre los dos.

Duro abandono de Alonso y otro ‘cero’ de Sainz

El pelotón de los puntos que se formó tras los coches grandes lo encabezaba Bortoleto, con Alonso agarrado a su DRS. Fernando paró en la vuelta 21, a la vez que el brasileño, y sus mecánicos contribuyeron para que adelantara al Sauber por la calle de boxes. Defendía la séptima posición virtual cuando la suspensión delantera del Aston Martin se rompió al pasar por el piano de Ascari, sin aparente violencia o agresividad. El abandono fue duro, porque de nuevo se encontraba en disposición de sumar valiosos puntos. La fiabilidad solo falla cuando importa.

Sainz tampoco puntuó, fue undécimo en una carrera que debió ir de otra forma. Para empezar, porque su estrategia fue perjudicial en comparación con Albon, que salía justo por detrás y empezó con un neumático duro, en lugar del medio de Carlos. Al final del primer ‘stint’, el español debió dejar pasar a Alex para no arruinar la vida útil de su neumático. A partir de ahí, llegaron los problemas. Un toque de Bearman en la segunda variante le hizo trompear y perdió tiempo y posiciones. Mientras tanto, la estrategia ‘larga’ de Albon se confirmó como mucho más certera, porque el tailandés progresó hasta la séptima posición al retrasar ese ‘pit-stop’ y hacer valer las gomas medias al final, superó incluso a Bortoleto o Antonelli.

El GP de Italia fue una fiesta que congregó a 370.000 aficionados a lo largo del fin de semana, récord para cualquier evento deportivo en el país. Lástima que buena parte de la gigantesca hinchada no supiera apreciar lo que había sucedido ante sus ojos. Antonelli no destacó, y los aclamados Leclerc (4º) y Hamilton (6º) pasaron sin pena ni gloria por la carrera más importante del año para Ferrari. Pero delante sucedió lo extraordinario. El piloto primó sobre la máquina. Pocas veces sucede en este deporte tan especial. Pero por una vez, ganó el mejor.

Vía As.com

Share

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *