El trágico accidente que sufrió en el GP de Japón de 2014 acabó con su vida nueve meses después
No podíamos pasar esta fecha sin hacer mención a Jules Bianchi. Es la única forma que nos queda de, al menos, mantener vivo su recuerdo. Esta y si además llenáis las redes con este #ForeverJules seguirá más vivo que nunca, al menos en nuestros corazones.
Hoy, 17 de julio de 2025, se cumplen diez años del fallecimiento de Jules Bianchi. El piloto francés sufrió un trágico accidente en el GP de Japón de 2014 que le provocó una serie de lesiones cerebrales que no pudo superar. Nueve meses más tarde falleció en Niza, su ciudad natal, a la que fue trasladado en noviembre del año anterior.
El 17 de julio de 2015 se confirmó la pérdida de uno de los grandes talentos de la parrilla de Fórmula 1, Jules Bianchi. El francés, tras un exitoso paso por categorías inferiores, dio el salto al Gran Circo en 2013 como piloto de Marussia e integrante de la Ferrari Driver Academy.
Durante sus dos años en Marussia, Bianchi fue la clara referencia de un equipo que sufría a más no poder para salir de la zona baja de la parrilla. De hecho, el francés sumó los dos únicos puntos de la historia de la estructura, en el GP de Mónaco de 2014, la carrera más próxima a su casa, donde protagonizó una de las grandes sorpresas de aquella temporada.
Los dos puntos de Bianchi en aquella carrera acabarían dándole a Marussia el colchón económico para seguir en Fórmula 1 un año más, pero él ya no estaría ahí. El 5 de octubre de 2014, durante el GP de Japón, Bianchi sufrió un gravísimo accidente por aquaplaning en la Curva Dunlop, impactando contra una grúa que había sido enviada para sacar el coche de Adrian Sutil, que abandonó una vuelta antes.
La carrera fue suspendida con efecto inmediato y Bianchi fue trasladado al hospital general de Mie. Allí le detectaron graves lesiones cerebrales y a los días, la familia hizo público que el piloto sufría una lesión difusa axonal. Fue trasladado el mes siguiente a su ciudad natal, a Niza, lo más cerca posible de su casa.
El piloto falleció el 17 de julio de 2015 tras permanecer nueve meses en coma y en ese momento se confirmó la pérdida de un piloto llamado a hacer grandes cosas vestido de rojo. Bianchi era uno de los jóvenes talentos mejor valorados dentro de la Scuderia y estaba destinado a hacer realidad su sueño más pronto que tarde reemplazando a Kimi Räikkönen en Maranello, algo que acabaría haciendo un íntimo amigo de la familia, Charles Leclerc.
Charles tenía a Bianchi como uno de sus mentores, una de las figuras de las que más había aprendido durante su juventud. Ambas familias siempre fueron muy cercanas, a través de la amistad que unía al hermano mayor de Charles, Lorenzo, y a Jules.
Otro piloto muy cerano a ese entorno siempre ha sido Norman Nato, íntimo amigo de Bianchi, a quien le dedicó un casco especial con emotivos mensajes en el ePrix de Mónaco de Fórmula E. Un precioso detalle que serviría para conmemorar el décimo aniversario del fallecimiento de Jules.
Diez años atrás, en la primera carrera tras su fallecimiento, el GP de Hungría de 2015, fue una de las mejores formas de rendir tributo a Bianchi. Una carrera preciosa, de las más emotivas que se recuerdan en los últimos tiempos y en la que la querida Ferrari de Jules se acabó ganando, de la mano de un Sebastian Vettel que le dedicó dicho triunfo vestido de rojo.
Vía SoyMotor.com