El coche de Hamilton y Bottas muy diferente de todo lo que hemos visto hasta ahora, más elegante, compacto y sin aleta de tiburón
El monoplaza del que hemos podido ver ya algunas fotos tiene una pinta magnífica, es como un atleta de cuatrocientos metros, fibroso, pero musculado, con una gran fortaleza, se agarra levemente la filosofía del concepto Zero al intentar asimilar toda la parte central lo más compacta posible.