El diario Marca comprobó de primera mano en Monza el legado de Fernando
Antes, durante y después. La relación de Fernando Alonso con Italia y Ferrari, su defensa a ultranza de Maranello mientras estuvo al volante de los cinco monoplazas que pilotó, caló entre los tifosi, que gustan de pilotos con carácter, bravos y capaces de elevar al coche donde no está.
El diario Marca pudo comprobar de primera mano, durante varios años, cómo la imagen de Fernando permanecía intacta entre los aficionados italianos más auténticos, los que viajan a Monza año tras año. No en vano sigue siendo el último ganador de Ferrari del Gran Premio de Italia, allá por 2010.
En 2013, año en que logró su última victoria con Ferrari, en España, y donde era evidente la superioridad del Red Bull, la cosa estaba clara: «Alonso se merece un 9 o un 12, es lo mejor que tenemos», comentaban
Aunque quizás lo más sorprendente fue comprobar en 2015 que no había rencor entre los aficionados tras su marcha a McLaren y alguna crítica a Ferrari. Además en el año espantoso con Honda, que parecía pasto de críticas y burlas. Nada más lejos de la realidad. «Su situación nos hace llorar», confesaban respetuosos, recordando que la culpa de su marcha la tuvo Ferrari. «Se sigue vendiendo todo lo que sacamos suyo en la tienda»
(La pancarta de despedida de Monza a Fernando este año)
Este mismo año, el anuncio de su marcha fue calificado como un «pecado» por la gran mayoría, que le sigue recordando como un gran campeón. De echo y tras los últimos rumores que apuntan a la vuelta de Domenicali a Ferrari, en la prensa italiana así como los propios tifosi, han tardado muy poco en especular con la vuelta de Fernando a la escudería del Cavallino.
Vía Marca.com
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En Italia quieren mas a Fernando que en España, que por cierto parece haberse olvidado hasta de que la F1 existe, en gran parte.
Hace bien. Al menos se está divirtiendo y no arrastrando por los circuitos. Vamos a ver con el paso del tiempo en que queda todo esto. Unos saludos muy fríos con estas heladas, pero siempre agradeciendo tu fidelidad.